Bueno, con este capítulo hemos llegado al ecuador de la temporada. Parece que fue ayer cuando se estrenó, pero ya llevamos 5 de los 10 capítulos de la tercera. Y la verdad, aunque empezó algo pausada, no tengo queja de los dos últimos capítulos. Tampoco de este, que tiene algunas escenas muy buenas.

Reseñas de los capítulos de la tercera temporada:

3×01 «Valar Dohaeris»
3×02 «Dark Wings, Dark Words»
3×03 «Walk of Punishment»
3×04 «And now his watch has ended»

Recordemos un poco en qué punto estábamos, y para eso está el célebre «previously on…». Dany con su ejército de Inmaculados; Davos preso en Rocadragón y Stannis totalmente dominado por Melisandre; algo de tensión con los Tyrell, que se van afianzando cada vez más en Desembarco del Rey; el Perro a punto de ser sometido a un juicio por combate contra Beric Dondarrion; Jaime y Brienne apresados y hechos polvo; más tensión, pero en las filas de Rob Stark, con su madre, Lord Karstark que quiere venganza y demás…

Iniciamos con el juicio por combate del Perro. Todavía abrumado por tener enfrente a Beric Dondarrion, Señor del Relámpago. No sé hasta qué punto ha quedado claro en la serie lo mucho que ha pasado Beric, y me temo que en la adaptación es algo que se ha perdido, pero bueno, no pasa nada, es imposible volcar toooodo lo que pasa en los libros en una adaptación y en conclusión, que yo personalmente no tengo mucha queja en cuanto a omisiones o «inventos» se refiere. Dicho esto, el juicio por combate de Sandor, en el que lucha contra Beric. En los preparativos ya vemos que algunas cosillas raras ocurren, con Beric prendiendo fuego a su espada cortándose la mano con ella, como si tuviese fósforo en la palma. ¡Buen truco, Dondarrion!

Total.  Beric Dondarrion con su espada de fuego versus Sandor Clegane «el Perro». Una batalla que se pone difícil y en la que los dos demuestran ser grandes luchadores… pero al final gana Sandor. Beric muere, y con ello Sandor queda absuelto. Y aunque se crea un poco de revuelo cuando Arya intenta someterlo a un nuevo «juicio», de repente todo pierde protagonismo frente a lo que está haciéndole Thoros a Beric: ¡lo resucita!

Más allá del Muro: Jon sigue con su misión secreta/ traición con los salvajes. Después de defenderlo por enésima vez, Ygritte reclama a Jon Nieve un pago en especie por todo lo que ha hecho por él. Así que allá va él, en una escena de esas guarrillas que salen en los libros… ¡al pilón, Jon Nieve!

Así que ya tenemos a Jon, habiendo roto sus juramentos, y tenemos el porqué del título del capítulo, «Besada por el fuego». Los que hemos leído los libros tenemos ventaja pues nos acordamos de más cosas… ¡pero está claro que no diré nada!

Y volvemos a Sandor y la Hermandad sin Estandartes. Una vez pasado el juicio, y quedando demostrado que es inocente, deciden que le dejarán ir, pero habiéndole despojado previamente del dinero que lleva encima. A Arya no le parece demasiado bien el asunto, pero finalmente le dejan ir, no sin advertirle Beric que «el Señor de la Luz no ha terminado con él todavía».

Jaime y Brienne son llevados ante Lord Bolton, que amablemente pone al día a Jaime de lo que ha ocurrido en Desembarco del Rey. Después, pone a Jaime a los cuidados de Qyburn, quien le cura la mano, intentando salvar en la medida de lo posible el resto de su brazo (a petición de Jaime), sin anestesia y a las bravas.

Desembarco del Rey. Vemos cómo Cersei, que sigue con su cruzada contra los Tyrell, recurre a Meñique, pidiéndole que los investigue antes de emprender su viaje a Nido de Águilas. Escena breve y a otra cosa.

Y la otra cosa son Tyrion y Olenna Tyrell hablando. Tyrion la ha mandado llamar para hablar de lo cara que va a ser la boda entre Margaery y Joffrey. Al principio ella se niega a aceptar lo que él le está solicitando (más dinero), pero finalmente acepta hacerse cargo de la mitad de los gastos. Bla bla… esta escena no me gustó demasiado, la verdad, entiendo que hay algún motivo para que Olenna esté teniendo tanta presencia en pantalla, pero no sé cuál debe ser.

Más al norte, Arya intenta convencer a Gendry de que vaya con ella al encuentro de su hermano Rob, pero Gendry quiere quedarse con la Hermandad, así que lo que espera a Arya parece que es quedarse cada vez más sola… ¿hasta que llegue a reencontrarse con Rob y su madre?

Y hablando de ellos, vemos cómo entre las filas de Rob hay gente que no le hace demasiado caso. Lord Karstark ha decidido llevar a cabo sus planes de venganza sobre los Lannister e irrumpe junto con otros en la celda de los escuderos. Ninguno sale vivo del ataque, así que Rob decide que el acto de Karstark es traición… Resultado: Rickard Karstark no termina la escena con la cabeza unida al cuerpo.

Otra vez vamos con Arya. Ahí es cuando explican cómo Beric ha muerto varias veces (seis, concretamente) y ha sido posteriormente resucitado por Thoros. Una conversación bastante interesante entre los tres – Arya, Beric, y Thoros – donde Arya descubre que Thoros no puede resucitar a su padre. Al menos lo ha intentado ¿verdad? Y ahora comentaré algo raro que me está pasando. Arya es uno de mis personajes favoritos de los libros, y sin embargo en la serie no acabo de empatizar con ella, ¿a alguien le pasa lo mismo?

Y de una punta de Poniente vamos a Rocadragón… ¡por fin conocemos a la legítima esposa de Stannis! Selyse Baratheon resulta que también es una beata sin remedio, y encima vive en una celda de mierda, pero vaya, que Stannis por fin va a verla con la intención de confesarle lo de esos cuernos tan bonitos que luce. Pero resulta que Melisandre la ha estado poniendo al día de todo: batallas, revolcones con Stannis… Como parece bastante convencida de que eso es lo correcto, sin problema.

Y eso no es todo, hoy tenemos un 2×1 y también conocemos a la hija de Stannis (única hija viva): Shireen, con su cara medio desfigurada. Davos sale en la conversación, y bueno, ya tiene algo en común con ellas dos: es un prisionero.

Y otra escena de baño vamos a tener en este capítulo, en este caso y después de la escena tórrida de Jon e Ygritte, veremos cómo Brienne mantiene una interesante conversación con Jaime mientras ambos comparten ese bañito que tanta falta les hacía. Menos sexo, pero conversación mucho más interesante. Gran escena y muy buenas líneas de diálogo de Jaime. Para mí, la escena más interesante – y mejor – del capítulo.

Jaime: Esa es. Esa es la mirada. La he visto durante 17 años en una cara tras otra. Todos me despreciáis. Matarreyes. Rompedor de juramentos. Un hombre sin honor. ¿Habéis oído hablar del fuego valyrio?
Brienne: Por supuesto.
Jaime: El Rey Loco estaba obsesionado con él. Le encantaba ver arder a la gente, la forma en la que la piel se ennegrecía, se ampollaba y se fundía separándose de los huesos. Quemaba señores que no eran de su agrado. Quemó Manos que le desobedecieron. Quemaba a cualquier persona que lo contradijera. No pasó mucho tiempo hasta que la mitad del país estuvo en su contra. Aerys veía traidores en todas partes. Así que hizo que sus piromantes almacenaran fuego valyrio por toda la ciudad… debajo del Septo de Baelor y de las calles del Lecho de Pulgas. Bajo las casas, establos y tabernas. Incluso debajo de la Fortaleza Roja. Finalmente, el día de la verdad llegó. Robert Baratheon marchó sobre la capital después de su victoria en el Tridente. Pero mi padre llegó primero con todo el ejército Lannister a sus espaldas, prometiendo defender la ciudad contra los rebeldes. Conocía a mi padre mejor que eso. Nunca ha sido dado a elegir al bando perdedor. Se lo dije al Rey Loco. Le insté a que se rindiera pacíficamente. Pero el rey no me escuchó. Tampoco escuchó a Varys, que trató de advertirle. Pero sí escuchó al Gran Maestre Pycelle, a ese viejo gris y decrépito. «Podéis confiar en los Lannister», le dijo. «Los Lannister siempre han sido amigos fieles a la corona.» Así que abrimos las puertas y mi padre saqueó la ciudad. Una vez más, fui a ver al rey, y le rogué que se rindiera. Me dijo… que le llevara la cabeza de mi padre. Entonces, él… se dirigió a su piromante. «Quémalos a todos», dijo. «Quémalos en sus casas, quémalos en sus camas.»Decidme, si vuestro querido Renly os hubiera ordenado matar a vuestro propio padre y permanecer impasible mientras miles de hombres, mujeres y niños son quemados vivos, ¿lo habríais hecho? ¿Habríais mantenido vuestro juramento? Primero, maté al piromante. Y luego, cuando el rey intentó huir, le clavé mi espada en la espalda. «Quemadlos a todos», seguía diciendo. «Quemadlos a todos». No creo que esperara morir. Lo que esperaba era arder con el resto de nosotros y alzarse nuevamente, renacer como un dragón para reducir a sus enemigos a cenizas. Le corté la garganta para asegurarme de que eso no sucediera. Entonces fue cuando Ned Stark me encontró.
Brienne: Si eso es verdad… ¿por qué no se lo dijisteis a nadie? ¿Por qué no se lo contasteis a Lord Stark?
Jaime: ¿Stark? ¿Creéis que el honorable Ned Stark habría querido oír mi historia? Me declaró culpable en el instante en que me vio. ¿Con qué derecho puede el lobo juzgar al león? ¿Con qué derecho?
(Intenta levantarse y cae en el agua)
Brienne: ¡Ayuda! ¡Ayuda! ¡El Matarreyes!
Jaime: Jaime. Me llamo Jaime.

De vuelta en Rocadragón, Shireen va a visitar a Davos, que está en las celdas acusado de traición. La verdad es que ya echaba de menos a este Caballero de la Cebolla. Y Shireen, aparte de a verlo, ha ido a dejarle un regalo… un libro. Aunque Stannis no sabe leer, ella quiere enseñarle. Cae maja esta niña, a pesar de esas escamas tan raras que tiene en la cara. Pues resulta que el libro trata de las historias de Aegon el Conquistador, y nada mejor que eso para establecer el nexo con la siguiente escena.

¿Será Daenerys una conquistadora, una reina loca, o una princesa mendiga? En la familia Targaryen siempre ha habido variedad, y no precisamente de cosas buenas. Pero allá que va ella con su flamante ejército de Inmaculados. Vemos cómo Jorah y Ser Barristan hacen buenas migas y charlan de los viejos tiempos, hablando de Robert, Thoros, de lo que pasará cuando Daenerys vuelva a Poniente… tengo que reconocer que algunas de las escenas de la parte de Daenerys esta temporada no me han parecido mal. Sin embargo, esta me ha parecido larga y sin demasiado aporte.

Con Rob Stark y Talisa, vemos cómo él le explica la estrategia que piensa seguir… ah, Rob, quizás no sea la mejor idea pedir ayuda a Walder Frey después del feo que le hiciste ¿no?

Y volvemos a Desembarco del Rey, allí Margaery le da esperanzas a Sansa sobre el plan de mandarla a Altojardín y casarla con Loras… pero Loras, y esto lo vemos rápido, está más interesado en otras personas. xD

Y ese chico resulta que espía para Meñique… que de ese modo se entera del secreto que quieren mantener oculto los Tyrell: el futuro matrimonio de Sansa. Pronto toma cartas en el asunto, y va a hablar con Sansa. Qué cara de viciosillo y depravado pone cuando está con ella, ¿verdad?

Y la última escena del capítulo, donde Tywin una vez más impone su voluntad entre sus hijos. Dado que a Jaime lo tiene a desmano (ja-ja, ¿lo pilláis?), son Tyrion y Cersei los que van a recibir sus órdenes. En este caso quiere casar bien a sus hijos. A ella con Loras y a él con Sansa, para desbaratar los planes de los Tyrell. Tremendo este Tywin, y digna de ver la cara que se les queda a sus cachorrillos cuando sale de la habitación.

Curioso capítulo ¿verdad? Tantas posibilidades… 🙂

El próximo capítulo, el 3×06, se titula «The Climb», y ahí van, como todas las semanas, la sinopsis y el avance con subtítulos:

Tywin planea unions estratégicas para los Lannister. Melisandre hace una visita a las Tierras de los Ríos. Robb establece un compromise para reparar su alianza con la Casa Frey. Bolton decide qué hacer con Jaime Lannister. Joh, Ygritte, y los salvajes se enfrentan a un ascenso sobrecogedor.