Ya tardaba este año en empezar a catar series británicas, y miniseries… me encantan las producciones de UK y siempre que veo alguna novedad interesante me la «embolso» aunque en ese momento no pueda verla.
Una curiosidad es que la primera escena que vemos tiene como protagonista a Jonathan Pryce, el mismo actor que da vida al Gorrión Supremo en la serie Juego de Tronos. Así que por ahí bien, la serie ya prometía a pesar de que ese fuese un personaje secundario. Pero claro, lo que importa no son solo – aunque son muy importantes – los actores, sino también la historia.
La miniserie es una adaptación de las dos novelas de Hilary Mantell, Wolf Hall y Bring Up the Bodies, y están centradas en el periodo que transcurre a partir del año 1500 (siglo XVI) y protagonizadas por Thomas Cromwell, una figura que llegó a ser de importancia en la corte de Enrique/Henry VIII. Y claro, uno piensa, ¿quién leches es Thomas Cromwell? Vamos a ponernos en antecedentes.
Henry VIII (al que aquí interpreta el muy conocido Damian Lewis) lleva 20 años casado con Catalina de Aragón (Joanne Whalley). Hasta ese momento no han tenido un hijo varón, y Henry lleva mucho tiempo pidiéndole al Papa la anulación del matrimonio; la urgencia se ve agravada por los deseos de Henry de casarse con la francesa Anne Boleyn/Ana Bolena (Claire Foy). No le es concedida, y la culpa de ese fracaso parece recaer en el Cardenal Thomas Wolsey (Jonathan Pryce), que no ha conseguido ese favor papal para el rey. El protagonista de la historia, sin embargo, no es ninguno de ellos sino el secretario del Cardenal, Thomas Cromwell (Mark Rylance). Hombre prudente, precavido, con una familia que mantener, y un rebelde en cierto modo, traspasando ciertos límites que en la época eran casi infranqueables.
En los seis capítulos se narra, partiendo de la posición de secretario de Thomas, el ascenso del personaje. Ya cuando lo conocemos, es la mano derecha del Cardenal, y sabemos que sus orígenes son muy humildes, sin nombre noble y con sus raíces en una familia trabajadora. Después de la caída en desgracia del Cardenal, veremos lo que ocurre para que Thomas siga manteniéndose a flote, y no solo eso, sino que conseguirá mejorar su posición y alcanzar más poder. No estoy muy ducha en historia, pero parece ser que el personaje de Cromwell no suele salir muy favorecido en los tratados históricos, descrito siempre como un personaje frío y manipulador. Sin embargo en la serie se retrata como una persona pragmática, sensata, alguien con unas ideas fuertes que buscaba defender frente al fanatismo de otros. Entre sus opositores, está otro Thomas, Thomas More (Anton Lesser, otro actor de Juego de Tronos, allí interpreta a Qyburn). Sirven de ayudantes a Thomas Cromwell dos chicos, uno de ellos Rafe Sadler (Thomas Brodie-Sangster), el otro Richard (Joss Porter), al que Thomas concede su apellido.
Thomas Cromwell no es perfecto, de hecho le gusta bastante vivir bien y no le hace ascos a los bienes materiales, es ambicioso, astuto a la hora de relacionarse en la corte, y a menudo se lo podría calificar de persona fría. Todo ello son motivos que sus enemigos esgrimen en su contra para desacreditarlo y quitarle poder. Hay varios hechos clave en los que Cromwell tuvo implicación, uno fue apoyar al rey para anular su matrimonio con Catalina de Aragón y casarse con Ana Bolena, para que la iglesia inglesa rompiese con Roma y para supervisar la disolución de los monasterios (mediante la cual el rey tomó posesión de todos los bienes de la iglesia en Inglaterra). Se ofrece un contrato íntimo y completo del personaje, donde se le muestra como un hombre inteligente, sagaz, y dispuesto a apoyar siempre a su rey en medio del revuelto clima político de la Reforma Protestante.
En cuanto a las actuaciones, no hay ninguna duda de que son impecables. Destacando sobre todo el resto está el protagonista, Mark Rylance, con un papel complicado. Al fin y al cabo, Thomas Cromwell es una figura muy famosa en UK por el papel que desempeñó en la historia de Inglaterra. Los secundarios son de lujo, y como he comentado hay muchas caras conocidas para los fans de las series (y no solo las de UK).
La historia, a pesar de que uno no la conozca demasiado (es mi caso) es interesante, se muestra de forma dinámica y es fácil de entender. Realmente, a poco que sepa uno de historia es difícil que no suene todo lo relacionado con Enrique VIII, Ana Bolena, etc. Lo que me ha gustado es que el foco esté centrado en un personaje secundario, de esos que suelen pasar desapercibidos, pero que al final son en muchas ocasiones los que realmente importan. Si tengo que buscar un defecto, es que a veces no quedaban claras para mí, los saltos en el tiempo, creo que hubiera estado mejor indicar claramente mes y año, por ejemplo.
La ambientación y el vestuario son sobresalientes. La serie fue rodada en varios lugares y castillos de Inglaterra que dan una sensación de verosimilitud enorme. He leído que ha habido quejas por haber algunas escenas demasiado oscuras, pero esto ocurre a resultas de iluminación con velas en algunos momentos. A mí me ha encantado la luz en todo momento, bastante sobria pero realista.
En resumen, si la historia os puede resultar atractiva, y buscáis una recreación bien hecha, bien dirigida, con una fotografía casi perfecta y plagada de buenos actores y actrices… dadle una oportunidad a los 6 capítulos de esta miniserie.
Para terminar, un par de enlaces interesantes:
– Las localizaciones de la serie
– Wulfhall, el lugar del cual la serie toma su nombre
Web oficial
Ficha IMDB
Número de capítulos: 6
Duración de cada capítulo: 60 minutos aprox.
Fechas emisión en UK: Enero-febrero 2015