No quiero dejar pasar más tiempo sin dar mi opinión sobre lo que ha sido uno de los acontecimientos televisivos del año pasado: el final de Breaking Bad. Un final que el verano del 2013 esperábamos con ansia, y que cuando llegó… uf! Ahora lo contaré.
Aviso: en esta entrada voy a comentar mi opinión sobre ciertos aspectos de la serie, y también sobre muertes y demás. Todo spoilerazos que te cagas. Y además mi opinión muy personal sobre la serie.
Breaking Bad ha sido durante los últimos años una de esas series que enganchaba muchísimo a quien la seguía. Uno podía conocer a alguien que decía «meh… pues no sé, he visto los dos primeros capítulos y no me mata mucho». Y la misma persona era un yonki de las aventuras de Walter White poco después. No es que sea una serie para todos los gustos. Reconozcámoslo: Breaking Bad tiene un ritmo particular, algunos capítulos avanzan lento y sus protagonistas no son demasiado simpáticos. Sin embargo, esos elementos son parte de lo que la ha hecho una de las series más grandes de la televisión. Su ritmo pausado engañaba, pues siempre parecían estar ocurriendo muchas más cosas de las que se veían a simple vista. Sus protagonistas eran personas torturadas y complicadas, personajes de esos que parecen de carne y hueso. No solo Walter White, sino también los secundarios, Jessie Pinkman, Skyler White, Hank, Marie, Saul… Y después de una quinta temporada partida en dos y ligeramente más larga que las cuatro anteriores, la serie llegó a su fin. Una serie, como hay pocas, con inicio, nudo y desenlace. Al final, todo quedó atado y bien atado. Todos los personajes llegaron a su conclusión. A algunos les tocó pagar sin ser culpables y otros se podría decir que se van relativamente de rositas… y a otros, pues les toca morir.
No quiero hacer una reseña recopilando hechos ni capítulos de la serie, sino una que sea más de opinión personal. Eso me cuesta, y por eso la he ido dejando durante meses, siempre teniendo muy presente que quería escribir algo sobre el tema, algunas veces incluso imaginando cómo sería cuando la escribiera… en fin, paranoias mías con el blog. Pero allá vamos, voy a intentar expresar por escrito las cosas que mientras duró la serie (y cuando terminó) fui hablando con la gente que conozco.
Walter White. Empecemos por el alma de la serie. Este personaje no hubiera llegado a ser lo que ha sido si no fuese por la estupenda interpretación de Bryan Cranston, un relativo desconocido antes de empezar Breaking Bad (¿os acordáis de Malcolm in the middle?) que con el paso de las temporadas se ha ido consagrando como actor y ha ganado algunos papeles en grandes producciones (de momento como secundario, ¿llegará a superar su papel de Heisenberg?). De Walter White ya se ha dicho todo lo que hay que decir, es un antihéroe magnífico, un hombre que evoluciona durante las cinco temporadas, pasando de ser un apocado profesor de secundaria que da muchísima lástima al principio de la serie, a ser un magnate de las drogas temido y odiado por muchos (gran parte de la audiencia tampoco le tenía mucho cariño hacia el final). Pero creo que en la conclusión de la serie, cuando lo vimos con todo ese dinero, solo y odiado y abandonado por su familia, consiguió redimirse ante el público y volver a dar un poquito de lástima. ¿Todo eso se lo había buscado? Sí. ¿Pero por buenos motivos? Se podría decir que sí. Pero también es cierto que sus buenos motivos – el amor por su familia, que durante toda la serie lo ha cegado y ha empujado a hacer de todo para conseguirles dinero – acaban no siendo los únicos para toda su carrera criminal.
“I did it for me. I liked it. I was good at it. And…I was…really…I was alive.”
[Lo hice por mí. Me gustaba. Se me daba bien. Y estaba… realmente… estaba vivo.]
Walter White le confiesa eso en el último capítulo a una Skyler que le ha abandonado, y que le echa en cara que no todo lo que hizo fue por ellos. Efectivamente, ante una familia que no le llenaba, una vida profesional que tampoco y a las puertas de la muerte, la adrenalina y la emoción tuvieron atractivo suficiente para Walter, que decidió que por una vez – con la excusa del dinero, familia, etc. – iba a hacer lo que le pidiera el cuerpo. Y por malas decisiones, no saber parar a tiempo o los motivos que fueran, la cosa se le escapó de las manos con las consecuencias que todos conocemos. Incluso él mismo se salió de madre, tomando ciertas decisiones muy polémicas y muy comentadas y consolidando los cimientos de su fama de cabrón: dejar morir a Jane, el ricino y Brock, son solo un par de ejemplos, no los únicos pero sí quizá de los más claros. En cierto punto del camino, Walter White pensó que vivir, o sentirse bien, requerían como condición necesaria manipular a los más cercanos (me refiero a Jessie) y quitarse estorbos de en medio para conseguir sus propósitos o proteger sus intereses o familia. El Sr. White, llegado cierto punto, se convirtió en Heisenberg, un señor de la droga con rasgos claramente sociopáticos. Y me encantaba.
Desde el momento en que por su causa – indirectamente pero así es – asesinan a Hank ante sus propios ojos, Walter emprende un camino para intentar redimirse y pagar por todo lo que ha hecho. Si con todo lo que hace al final lo consigue o no, eso puede juzgarlo cada uno. Yo por mi parte siempre siento inclinación a sentir cierta simpatía por este tipo de antihéroes, así que entiendo perfectamente al personaje. Ya digo, para mí no ocurre algo tan simple como que Walter fuera un sociópata y una mala persona, sino que creo que de alguna manera, lo que se trata de contar en la serie es que dentro de todos nosotros – incluso de las personas menos probables – hay una semilla de ambición y sed de emociones. Y la ambición en el caso de Walter no se limita al dinero, sino que trata más bien de poder. En las últimas temporadas, los actos del personaje parecen más fruto de la sed de poder y control, que la de dinero (que, obviamente, también). Así que me gustaría romper una lanza a favor de Walter White/Heisenberg, porque en cierto modo entiendo su ambición, sus errores y su trayectoria. Y en su favor hay que decir que supo darse cuenta – no a tiempo, pero lo hizo – de todo lo que había hecho e intentó enmendarlo. Walter White evolucionó y se convirtió en Heisenberg, pero en él había ya una semilla de todo lo que vendría. Walter es un mentiroso nato, un asesino converso, un manipulador y estratega genial, y uno de los mejores personajes que nos ha dado la televisión. Y no creo que se mereciese morir triste y solo como lo hizo.
«Technically, chemistry is the study of matter. But I prefer to see it as the study of change. Just think about this. Electrons. They change their energy levels. Molecules. Molecules change their bonds. Elements. They combine and change into compounds. Well, that’s all of life, right? It’s the constant, it’s the cycle. It’s solution, dissolution. Just over and over and over. It is growth, then decay, then transformation. It is fascinating, really.«―Walter White
[Técnicamente, la química es el estudio de la materia. Pero prefiero verlo como el estudio del cambio. Solo pensad en esto. Electrones. Cambian sus niveles de energía. Moléculas. Las moléculas cambian sus vínculos. Elementos. Se combinan y cambian para ser compuestos. Bueno, eso es la vida, ¿no? Es la constante, es el ciclo. Es solución, disolución. Una y otra vez. Es crecimiento, luego putrefacción, luego transformación. Es fascinante, de verdad». – Walter White]
Jesse Pinkman. Jesse es importante en la serie simplemente porque lo es para Walter White. Y es que aunque al principio no es más que un instrumento de Walter para introducirse en un mundo que no conoce, algunas de las mayores atrocidades que comete durante la serie son motivadas por la voluntad de manipular a Jesse y mantenerlo a su lado. Llegado a cierto punto, se desarrolla una cierta dependencia entre los dos, una que cuanto más crece por parte de Walter, mayor rechazo provoca en Jesse (debido a las cosas que llega a hacer).
«Open your eyes! Can’t you see that I needed you on my side to kill Gus. I ran over those gang bangers, I killed Emilio and Krazy-8, why? I did all of things to try and save your life as much as mine! But only you’re too stupid to know it!»
«¡Abre los ojos! ¿No puedes ver que te necesitaba a mi lado para matar a Gus? Me cargué a esa pandilla, maté a Emilio y Krazy-8, ¿por qué? ¡Hice todas esas cosas para intentar salvar tu vida tanto como la mía! ¡Pero eres demasiado estúpido para darte cuenta! – Walt a Jesse
Jesse es quizás uno de los personajes más dañados de la serie. Fácilmente manipulable, con una mente bastante débil y bastante voluble en su manera de ser, llega a ser en muchos momentos ciertamente desesperante ver cómo duda, cómo mete la pata y cómo, en definitiva, obliga a hacer ciertas cosas a Walter para arreglar sus desaguisados. Aún así, para mí es un gran personaje, y me alegro de que finalmente no se lo cargaran al final de la primera temporada como estaba planeado. El final de la serie nos deja a un Jesse devastado y hecho polvo, para el cual se adivina un futuro bastante oscuro debido a todo lo que le ha tocado o ha elegido vivir.
Hank Schrader. Él es «de los buenos» en la serie, de los pocos que hay. Hank, durante toda la serie, solo hace lo que cree que debe hacer y es más, se mantiene fiel a sus principios. Solo cuando ya es demasiado tarde se da cuenta de que el tal Heisenberg al que buscó durante tanto tiempo, es en realidad el afable pero rarito cuñado con el que a menudo hace barbacoas o toma cerveza. Su historia es de las más trágicas de la serie. Ni Jane, ni la familia de Walt… Hank es realmente de los que se lleva la peor parte de la historia sin pretenderlo. Esa fuerza de carácter que saca en la última temporada, cuando se entera de que Walt=Heisenberg, es de admirar. Aunque realmente no era consciente de a quién se enfrentaba. Cuando intenta manipular a Skyler en contra de su marido y amenazar a Walt, cree que enfrente tiene realmente al Walt que siempre ha conocido y no al temido e implacable Heisenberg.
Sin embargo, no es un santo tampoco. Es a menudo racista, irrespetuoso y un bocazas. Aún así, me dio muchísima pena lo que le pasó. Su muerte es uno de los momentos más intensos de la serie.
«You want me to beg? You’re the smartest guy I ever met, and you’re too stupid to see—he made up his mind ten minutes ago.«
«¿Quieres que suplique? Eres el tipo más listo que he conocido nunca, y eres demasiado estúpido para darte cuenta – ha tomado su decisión hace diez minutos».
Las mujeres en Breaking Bad. Creo que aquí podríamos meter en el mismo saco a Skyler y Marie, las hermanas más odiosas de todos los tiempos. Son los principales personajes femeninos de la serie, y, no sé vosotros, pero yo acabé hasta los mismísimos de las dos. Hay quien odia más a Marie, yo a quien no podía ver era a Skyler. Recuerdo que hace tiempo la actriz (Anna Gun) dijo en una entrevista que los fans de la serie la odiaban por ser una mujer fuerte y no someterse a su marido, por ser «la igual de Walter». Bueno, qué puedo decir yo, primero diré que me parece un argumento muy simplista pero entiendo que en el momento en que dijo eso era incapaz de opinar o pensar en el tema con cierta imparcialidad. También entiendo que a veces se recurre al manido recurso del sexismo con el afán de disculpar personajes femeninos odiosos, o incluso absurdos. Skyler fue durante toda la serie una neurótica con un montón de altibajos emocionales. Cambiaba de opinión a cada momento, siempre se quejaba y todo lo que hacía Walt le parecía mal… hasta que llegaba el momento de cobrar. Así que de mujer íntegra y fuerte, nada. Y mucho menos una igual para Walt.
Y ya que estoy en el tema, me gustaría comentar que, dado que tanto Marie como Skyler eran bastante inestables casi todo el tiempo, quizá sí que habría que disculpar a los personajes. Quién sabe qué infancia tuvieron esas niñas… xD Pero sí, Skyler se ha convertido en uno de los personajes más asesinables, odiosos y antipáticos de la tele por ser egoísta, histérica, interesada y un prototipo de mujer amargada y frustrada. Por eso la odiaba, y por eso era necesaria. Que fuera un personaje odioso no quería decir que sobrase en la serie o que estuviese mal escrito. Así que lo que tengo en contra de Skyler y Marie es que… hay gente como Skyler y Marie en el mundo real. Y en la serie nos recuerdan eso.
Los secundarios. Meter en el mismo saco al irrelevante pero omnipresente Walter White Jr. (del que las malas lenguas decían que siempre estaba desayunando), que a grandes personajes como Mike o Gus Fring me parece inmoral. A estos dos últimos tampoco me gustaría equipararlos a Lydia y Todd, unos patéticos intentos de traficantes que intentaron tomar las riendas del negocio en la última temporada.
Mike y Gus fueron dos de los grandes alicientes de Breaking Bad. Walter White no podría haber conseguido lo que consiguió sin tenerlos alrededor. Y es, en parte, a causa de ellos dos que llegué a odiar a Walter. Heisenberg dejaba un reguero de muertos allá por donde pasaba. Ya fuera un cartel de drogas mexicano, matones de medio pelo, niños inocentes, gente curtida por la calle o incluso colegas de negocio fueron cayendo poco a poco. Y tanto por las víctimas inocentes – o no tanto – como por los mayores cabrones (y ahí estaría Gus… y Mike en parte, inolvidables las escenas con sus nietos), fuimos acumulando una inquina hacia el personaje de Walt.
Y es que en el fondo, ¿todo eso para qué? Creo que en parte, odiábamos a Skyler porque Walt esgrimía el bienestar de su familia para hacer todo lo que hacía. Pero por supuesto, no hizo falta que lo dijera en voz alta, porque desde hacía tiempo, mucho antes del final, sabíamos que lo que hacía, lo hacía por su propia sed de poder y control. Pero, sin ánimo de generalizar, me gustaría decir que aunque hay muchas personas que no harían todo lo que él hizo por nada del mundo, hay muchas otras que sí, y en la diversidad a veces está la calidad. En esta serie se puso el foco sobre ese ser inconcreto que suele ser el villano en otras producciones. Creo que no es necesario que un protagonista tenga buenas intenciones ni fuertes principios morales, para que sea un buen personaje y a su alrededor gire una gran serie. Breaking Bad es la prueba.
“Guess I got what I deserved/kept you waiting there too long my love,
All that time without a word/Didn’t know you’d think that I’d forget.
Or I’d regret.
Special love I had for you … My baby blue.”
[Supongo que tengo lo que me merecía/te he tenido esperando demasiado tiempo, mi amor
Todo ese tiempo ni una palabra/No sabía que pensarías que me habría olvidado.
O que me arrepentía.
Sentía un amor especial por ti… Mi pequeña triste.]
Web oficial
Ficha IMDB
Temporadas: 5
Fecha emisión USA: Enero 2008-Septiembre 2013
Número de capítulos en total: 62
Para mi es mi serie. La serie. La mejor que se ha hecho con diferencia. Como tú bien dices es redonda. Tiene planteamiento, nudo y desanlace, y está tan rematadamente bien hecha, que es una obra maestra.
Seguro que me paso, pero es que soy MUY FAN, y los fans, ya se sabe… se nos va la pinza.
Respecto a los personajes, me quedo con Walter, aunque Pinkman según van avanzando las temporadas mola mucho. Los dos son brutales.
Me dio mucha pena acabarla…
También está en mi Top, y será difícil que alguna de las nuevas la desbanque. Los dos personajes son muy carismáticos, tanto Walter como Pinkman, aunque me quedo siempre con Walter con su luz y su oscuridad, y su ambigüedad moral.
A mí también me dio pena, pero a la vez me alegré de que el final fuese coherente. Muy GRAN serie. 🙂
¡Por fin! Qué alegría leer tu reseña (aún nos debes la de la última de Batman, que no se me olvida ) Completamente de acuerdo con tu crítica (aunque difiero un poco en lo que dices de Jeese, para mí tendrá su redención y un destino menos sombrío). Ahora ciertos vídeos que no tienen pierden:
Como éste, el verdadero final de la serie:
Y aquí otros tantos recomendados:
¡Saludos!
Lo sé, lo sé… la de Batman te la debo a ti. 🙂
Y no sé cuándo, quizá no hoy, ni mañana, ni el mes que viene, pero la publicaré.
Me gustaría pensar que Jesse tendrá un destino menos sombrío, quizá a veces soy demasiado pesimista.
Gracias por los links, hay vídeos buenísimos por ahí, se nota cuando una serie levanta pasiones!! 😉