Pues parece mentira, pero ya solo quedan dos capítulos para despedir la tercera temporada de Juego de Tronos, y las cosas están bastante calentitas, como sabréis los que habéis leído los libros. Y también los que no, que la tensión es la tensión y está ahí y no hace falta saber qué va a pasar exactamente, para saber que sí van a pasar cosas.

En este capítulo, como en todos, tendremos escenas de muchos de los personajes. No veremos a algunos de los que sí tuvimos en el 3×07, pero ya tocaba volver a ver a algunos ¿no? Y además, tendremos algunas escenas icónicas, como la de la daga de Sam, o las sanguijuelas en el fuego (adornada esta última con un despelote de Melisandre)… Empezamos, y como siempre, la entrada estará repleta de spoilers. 🙂

En las tierras de los ríos, Arya y el Perro viven momentos de tensión. Básicamente, ella quiere matarlo desde hace mucho tiempo, pero cuando lo intenta porque ve una pequeña ocasión, él le dice con malas palabras que si no tiene éxito le va a hacer pupita. Finalmente, él le desvela lo que quiere hacer con ella. Al contrario de lo que ella creía (que la llevaría a Desembarco del Rey), Sandor piensa llevarla a los Gemelos, donde será la boda de su tío Edmure y estará buena parte de su familia, y pedirá un rescate por ella.

Al otro lado del Mar Angosto, Dany descubre a través de Jorah Mormont que los Yunkai han contratado a un grupo de mercenarios que se llaman los Segundos Hijos. El líder de esos mercenarios es Mero (Mark Killen), el Bastardo del Titán, y por debajo de él están sus dos tenientes: Prendahl na Ghezn (Ramon Tikaram) y Daario Naharis (Ed Skrein). Aunque en su primer encuentro intenta sobornarlos para que rompan su trato con los Yunkai, ellos no lo tienen muy claro y al final aceptan tomar una decisión esos días.

En Rocadragón, vemos cómo Melisandre vuelve de su viaje a Desembarco del Rey con su nuevo botín: Gendry. Después de enseñárselo a Stannis, se quedan los dos solos (Melisandre y Stannis) y hablan de lo que van a hacer con él. 

En las mazmorras, vemos cómo Davos está aprendiendo a leer, y viene Stannis a interrumpirlo. Quiere discutir el plan de Melisandre, que no es otro que realizar un sacrificio con Gendry. Davos no está de acuerdo, e intenta convencer a Stannis de que no pueden hacer eso, que Gendry es su sobrino, aunque sea un bastardo… Pero claro, ya sabemos que Stannis es bastante cabezota y/o fanático ¿no? Pues eso. Aún así, libera a Davos haciéndole prometer que nunca hará daño a Melisandre. Esta es una buena escena por ambos lados, tanto Stannis como Davos tienen buenas piezas de diálogo, cada uno defendiendo su postura. Me gustó.

De vuelta al otro lado del Mar Angosto. Los líderes de los Segundos Hijos discuten qué hacer con la oferta de Daenerys. Como no quieren aceptar lo que les ha ofrecido por luchar a su lado y no pueden vencer al ejército de Inmaculados, deciden que lo mejor será asesinarla a ella esa misma noche colándose en su tienda. Y el azar en forma de monedas decide que será Daario quien lo hará.

Desembarco del Rey. Con su boda próxima, Tyrion va a ver a Sansa para intentar darle ánimos y tranquilizarla con respecto a las  malas expectativas que pueda tener por ir a casarse con él. La verdad es que es muy majo este Tyrion, en este capítulo tiene una gran presencia y me gusta. Vale que no es nada nuevo, pero Peter Dinklage es completamente el Tyrion de los libros en todos los sentidos.

Y muy poco antes de la boca, también vemos cómo otras personas hablan de lo que va a ocurrir. En este caso son Margaery y Cersei las que tienen una charla, mucho más tensa que la del futuro matrimonio. Con muy buenas palabras pero la boca apretada, Cersei le explica a Margaery la historia de la canción «Las lluvias de Castamere». La canción trata sobre cómo su padre destruyó la casa de Castamere, otrora muy rica y poderosa, al igual que lo es la casa Tyrell en este momento… Esta Cersei, qué malos modos se gasta… Me encanta. 🙂

Y empieza la boda. Mientras Tyrion espera en el altar, y Sansa está a punto de dirigirse allí, aparece Jofrey para acompañarla hasta donde espera su tío. Buscando avergonzar a su tío, aparta el peldaño que Tyrion tenía para ayudarse a estar a la altura de Sansa en la ceremonia, pero el enano se las ingenia de otro modo.

Y en la escena de folleteo y despelote de rigor en el capítulo, Melisandre va a ver a Gendry a sus aposentos, donde hablan un rato, y pronto se ponen a la faena. Lo que él no espera es que ella le ate y le ponga unas sanguijuelas encima. El objetivo, claro, es que chupen algo de esa «sangre de rey» que tiene en tanta abundancia. Al poco rato, vemos llegar a Stannis y Davos. Stannis va tomando los bichos y los echa al fuego mientras pronuncia los nombres de sus competidores aspirantes al Trono (usurpadores, claro, según él).

Y de vuelta en Desembarco del Rey, ya están en el banquete de bodas. Tyrion le está dando fuerte a la bebida y está más que borracho ya. Tywin, como padre mandón que es, va a echarle una pequeña y discreta bronca para recordarle que lo que tiene que hacer es beber menos y fecundar más. También vemos cómo los Tyrell están sentados todos juntos, como a distancia de todos los demás y de lo que ocurre. En un momento dado, a Joffrey le apetece putear de nuevo a su tío y a Sansa y la amenaza con violarla esa misma noche. Cuando, no contento con eso, exige que tenga lugar la ceremonia de encamamiento de los recién casados, Tyrion le amenaza con un cuchillo, y cuando las cosas se ponen serias, aduce que está muy borracho.

Cuando se van a la habitación, aunque Tyrion parece tentado de consumar el matrimonio, le dice a Sansa que no harán nada hasta que ella lo desee. Y puede que no lo desee nunca, claro…

En el campamento de Daenerys, y como vimos con los mercenarios, Daario se cuela en los aposentos de Dany. La sorpresa es que no va a matarla, sino a ofrecerle las cabezas de sus compañeros y jurarle lealtad. Aquí tenemos la otra mitad de la cuota de desnudos del capítulo, con Dany dentro y saliendo de la bañera, y otra vez Daario… que me da una rabia que no os lo podéis ni imaginar. xD

Y ya… la última escena y la única que está ambientada en el norte. Más allá del Muro Sam y Gilly siguen con su viaje de vuelta al Muro, donde buscarán refugio. Están ellos dos solos y el bebé, y mientras hablan del nombre que le pondrán al niño, pasa algo raro. Primero, un montón de cuervos se ponen a hacer ruido alrededor de la cueva, y eso hace salir a Sam para ver qué pasa. Pero un Caminante Blanco anda cerca y le ataca. La espada de Sam no le hace ningún daño, pero cuando, desesperado, intenta atacar a la criatura con su daga de vidriagón, es capaz de matarlo. La última escena es la visión de Sam y Gilly huyendo, perseguidos por cuervos, dejando la daga abandonada en la nieve. Buena escena, con mucha tensión.

Y, ¿a que hay ganas de ver el capítulo siguiente? Pues el capítulo 3×09 se hará esperar. Tendremos que aguantar dos semanas, pues hasta el día 2 de junio no emitirán «Rains of Castamere». Después de eso, el 9 de junio tocará final de temporada, con el capítulo titulado «Mhysa». La sinopsis del 3×09 es:

Robb Stark se presenta ante Walder Frey en Los Gemelos y Edmure Tully conoce a Roslyn, su futura esposa. Jon Nieve debe enfrentarse a una dura prueba, mientras que Bran descubre un nuevo don. En Yunkai, Daario Naharis y Jorah discuten sobre cómo van a tomar la ciudad. Se produce la unión entre la casa Frey y la casa Tully.