Me llamo Neil Truman, y tengo lo que cualquier hombre de América desea. Una tele 3D de 80 pulgadas. Veo en ella Sportscenter… De vez en cuando un programa de pesca… Y a veces, cuando mi mujer se está vistiendo, echo un vistazo y encuentro una de esas películas de porno blando que puedes encontrar en el cable 24 horas al día. No es que Grace no me satisfaga, incluso después de 18 años de matrimonio. Pero con dos agendas ocupadas y todo el estrés de cuidar de la familia, no podemos encontrar nunca el momento para conectar. A mi hija no parece importarle. Pero a los 16, sé que estos son los años en que más necesita a su padre. Hago todo lo que puedo para estar ahí para ella, pero casi nunca estoy en casa porque estoy aquí: Bastian National Investments. A veces 70 horas a la semana. Parece como el doble cuando te estás perdiendo a tu hija crecer. Aún así, sé que soy un tipo muy afortunado. Pero cuando elegir qué color de corbata se convierte en lo más excitante del día… Algo no está bien.
Otro de los estrenos veraniegos, este con un actor protagonista que podréis recordar por ser también protagonista de la serie The Glades. La serie se centra en un hombre de mediana edad que está experimentando una crisis existencial en toda regla.
Neil Truman (Matt Passmore) es un ejecutivo bien pagado de una firma de brokers. Pero claro, también dedica casi el doble de horas a la semana que otras personas a su trabajo. Eso le distancia de su mujer e hija adolescente, y al inicio de la serie se encuentra lleno de dudas con respecto al estilo de vida que lleva. Sí, no le faltan cosas materiales, pero a cambio casi no puede pasar tiempo con su hija, a la que desearía dedicar más momentos y a la que quiere ver crecer. Su trabajo le proporciona una vida cómoda, pero a cambio le aburre y no le motiva. Con su mujer casi no pasa tiempo tampoco, y la comunicación entre ellos se limita a asuntos cotidianos. Hasta que un día explota, y toda su vida cambia. También tenemos el punto de vista de su mujer Grace (Stephanie Szostak), que se encuentra atrapada en su vida de de mujer casada, quiere volver a trabajar y no lo tiene fácil, y está hambrienta de nuevas aventuras. Por su parte, la hija de los dos, Anika (Michelle DeShon) ve cómo sus padres se pelean de vez en cuando y son infelices, y también sufre por la falta de atención de ellos. El detonante de todo ocurre cuando a raíz de un incidente en un avión, Neil deja su trabajo un día y vuelve a casa antes de la hora prevista. Se encuentra a Grace teniendo sexo con otro hombre, un desconocido para él. Resulta que Grace ha estado pagando por sexo durante meses a Simon (Blair Redford), ese hombre, y evidentemente Neil no lo sabía.
Así que como los pilla in fraganti, pero ellos no se dan cuenta, espera a que Simon salga fuera de la casa y lo sigue en coche. Cuando consigue hablar con él (hablar puede que no sea la palabra), y se entera de todo el asunto. Sin embargo, decide no contarle nada a Grace y se inventa una excusa para no contarle tampoco lo de su trabajo. Por una casualidad, Neil coge el teléfono de Simon y recibe una llamada de una clienta de este. Decide asistir, y aunque ella espera a Simon no lo había visto antes… así que él puede hacerse pasar por él. Aunque al principio es torpe y por poco no provoca que ella salga corriendo. Veremos así cómo Neil se introduce en el mundo de los «escorts». Contado así, puede ser una premisa un poco rebuscada e incluso un poco estúpida, y yo misma pensaba eso antes de ver el piloto. Peeeero… a pesar de tener una duración superior a lo normal (los demás capítulos se supone que tendrán una duración más estándar), el capítulo me ha parecido elegante, bien hecho y bastante entretenido. El personaje de Neil cae bien, el equilibrio entre la tristeza y el humor de la serie está bien buscado, y lo más importante de todo es que me ha hecho tener ganas de ver más. Seguramente siga viendo más capítulos, para ver cómo evoluciona la historia de Grace, pero sobre todo la de Neil.
Eso sí y todo hay que decirlo, de momento la serie adolece de ese defecto que es la falta de realismo. Todo el mundo es guapo, las mujeres dispuestas a pagarle a Neil son atractivas… pero en fin, supongo que eso es un mal endémico en algunas series de televisión. Las convierte en más agradables para la vista, eso sí, pero también las hace parecer más falsas que un Judas de plástico.
Satisfaction se estrenó en la cadena USA Network la misma noche que Rush (que reseñé hace un par de días), y al igual que esa otra serie, no tuvo audiencias demasiado espectaculares.
Web oficial
Ficha IMDB
Fecha estreno USA: 17 de julio de 2014
Duración del piloto: 65 minutos
Información Bitacoras.com
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Me está gustando, creo que Satisfaction es una propuesta bastante entretenida, y aunque no puedo dar una crítica muy argumentada porque recién la comencé a verla, me parece que vale la pena verla. Además me recuerda a la serie O negocio, cuya historia está basada en el mundo de la prostitución pero abordada desde el punto de vista del marketing, muy recomendable.