Bueno, pues otra semana que empieza, todavía tengo reseñas de series pendientes de ayer (Betrayal y Hello Ladies), y esta tarde tocará colgar la «agenda» de series de esta semana. Pero voy a hablar un poco de The Crazy Ones. En esta nueva comedia, vemos la vuelta al mundo televisivo de Sarah-Michelle Gear (que fracasó estrepitosamente hace un par de otoños con Ringer), y como plato fuerte tenemos a Robin Williams, toda una institución en el mundo de la comedia. Ojo que, como suelo hacer, he buscado qué tal le fue en cuanto a audiencias a The Crazy Ones en su estreno, y chicos, lo ha petado. Dicho con mejores palabras, este ha sido el estreno de una serie nueva más visto este otoño, seguido por más de 15 millones de personas en USA.
La serie se centra en una agencia de publicidad y el hombre que está a la cabeza de esta, Simon Roberts (Robin Williams). Simon es un hombre excéntrico, extraño y con una gestión de sus emociones algo caótica. Su hija, Sydney Roberts (Sarah Michelle Gear), es la directora creativa de la agencia, mucho más sensata, más racional… La desastrosa gestión de la vida personal de Simon y sus rarezas no impide que sus clientes tengan en alto concepto su creatividad y trabajo en la agencia, pero a pesar de eso, su hija sigue siendo en muchas ocasiones su voz de la conciencia y la que le saca de muchos líos.
En la agencia también trabajan Lauren, asistente de Martin. Lauren le ríe todos los chistes y ejerce un poco de madre y le anima en algunos momentos. Por otro lado tenemos a Andrew, el director artístico, neurótico pero muy trabajador. Y por último, aunque no por ello menos importante, está Zachary, el guaperas de la oficina, siempre dispuesto a echar una mano a su jefe, cantar, ir de fiesta o hacer lo que sea necesario para sacar un trabajo adelante. El actor que interpreta a Zach, James Wolk, me sonaba muchísimo pues no hace tanto lo hemos visto trabajar en otra agencia de publicidad, pero de unas décadas antes y más estilo, codo con codo con Don Draper.
En este piloto, más breve aún que los que estamos acostumbrados a ver (no llega a los 20 minutos), se explota la relación entre padre e hija, que a menudo tienen los papeles cambiados en cuanto a responsabilidad. Hay momentos tiernos, momentos divertidos de Robin Williams, y se desarrolla una dinámica interesante entre los personajes de Simon y Zach, dinámica que podrían desarrollar más adelante para crear otras escenas divertidas de colegas. En una serie que tiene vertiente familiar aparte de la situacional del lugar de trabajo, siempre existe el riesgo de que carguen mucho las tintas con el rollo emotivo y dejen olvidada la comedia. Personalmente, me gustaría que explotasen el lado «loco»
Como curiosidad, durante este piloto dan la explicación al nombre de la serie. En realidad toma su nombre de un spot de Apple de 1997 denominado así – The Crazy Ones (Los locos) -, y que mostraba a toda una serie de «locos» geniales: Einstein, Picasso, Gandhi, John Lennon…
Una última curiosidad: Como primer cameo en la serie tenemos en este capítulo una aparición bastante extensa de la cantante Kelly Clarkson, a la que los Martin acuden en busca de ayuda para un spot de McDonalds.
Así que en resumen… una comedia bastante light con dinámica padre-hija, algunos puntos graciosos, algún secundario con potencial. Veremos qué tal sigue.
Me han gustado… las escenas divertidas, sobre todo las protagonizadas por Zach y Simon, y no tanto aquellas basadas exclusivamente en la gracia que puede tener Robin Williams por sí mismo y sin apenas pestañear.
No me ha gustado… la vertiente emotivo-familiar que a ratos tuvo el piloto. Vale que no son robots sin alma y que los protagonistas son padre e hija, muy unidos, pero ¡un poco menos de azúcar!
Web oficial
Ficha IMDB
Fecha estreno USA: 26 de septiembre de 2013
Duración del piloto: 20 minutos aprox.
A mi me ha puesto muy nervios Robin WIlliams… no se yo si voy a poder seguir si está en ese plan todo el tiempo.
Yo veré alguno más, pero no me ha convencido ni está en mi línea lo suficiente como para engancharme.
Y sí, de eso de que solo por estar haciendo payasadas hace gracia, están bastante seguros los creadores de la serie al parecer… Tendrán que aportar algo más que azúcar y robin Williams haciendo muecas, si continúan muchos capítulos.