Título original: Unthinkable
Año: 2010
Director: Gregor Jordan
Guión: Peter Woodward
País: USA
Duración: 97 minutos
Ficha en IMDB: Ver
Reparto: Samuel L. Jackson (Henry Harold ‘H’ Humphries), Carrie-Anne Moss ( Agente Helen Brody), Michael Sheen (Steven Arthur Younger), Stephen Root ( Charles Thompson), Lora Kojovic (Rina Humphries), Martin Donovan (Jack Saunders), Gil Bellows (Agente Vincent), Vincent Laresca (Agente Leandro), Brandon Routh (Agent D.J. Jackson)
Un hombre (Michael Sheen) enciende una cámara para grabarse a sí mismo varias veces, siendo solamente capaz de articular la frase «Me llamo Steven Arthur Younger y soy ciudadano estadounidense» sin ser capaz de seguir… hasta que sigue. Y resulta que es un americano de religión musulmana, del tipo extremista y terrorista, que está grabando una vídeo-amenaza. Estamos ante una peli que toca un tema sensible, pues. Un tema que por desgracia lleva de plena actualidad ya muchos años, y que evidentemente, para los estadounidenses es muy doloroso desde los atentados del 11-S.
Después de eso, y sin saber nada más, la acción que viene a continuación se centra en agentes del Gobierno investigando dónde ha colocado las bombas (que son nucleares, nada menos), y la película se convierte en una carrera contrarreloj para averiguar lo que deben saber para salvar miles de vidas. Dentro del grupo de investigación se encuentra la agente Helen Brody (Carry-Anne Moss). También consiguen que les ayude un experto en interrogatorios duros (vamos, lo que vienen siendo torturas), Henry Herald ‘H’ Humphries (Samuel L. Jackson), que llevará a cabo todas las acciones necesarias para sacarle la verdad al sospechoso.
A partir de ahí, y con el plazo límite de dos días, empezará una tortura brutal, con el beneplácito del gobierno, un mal menor (la vulneración de derechos de un ciudadano) para conseguir un bien mayor (salvar la vida de otros ciudadanos). Y ese es el meollo de la película, si es moral o lícito asumir un mal menor para conseguir los objetivos, si está bien dejar la humanidad a un lado cuando uno se enfrenta a personas que han mostrado muy poca. ¿Para combatir a un monstruo, hay que convertirse en monstruo también?
Durante la película se habla de leyes, de derechos, la Convención de Ginebra, las triquiñuelas legales que llevan a cabo para poder saltarse las leyes de protección al acusado. Básicamente, la película es la exhibición y el debate interno de la protagonista, que no deja de censurar lo que se está haciendo… y claro, el espectador se ve forzado a tomar partido. ¿Es mejor respetar las leyes hasta sus últimas consecuencias? ¿O debe anteponerse la idea de que el fin justifica los medios?
Toda la película gira en torno a ese dilema moral, con posturas enfrentadas o con matices diferentes, personificadas por los distintos personajes, o incluso con una postura que es la del Gobierno, que se expresa a partir de un portavoz o supervisor. En cuanto a personajes/actuaciones, me quedo claramente con Michael Sheen y Samuel L. Jackson, al realizar Carrie-Anne Moss un papel mucho más «facilitador» que realmente central en la trama (al menos en mi opinión).
La película resulta bastante fluida, bastante entretenida, con varios momentos interesantes y el resultado final es un thriller bien hecho, en mi opinión, y con cuestiones interesantes de trasfondo. Si os preocupa el tema violencia, deciros que la que se lleva a cabo durante toda la película no llega a ser explícita, aunque sí se hace saber al espectador qué tipo de cosas le hacen al prisionero. O sea, que para personas muy aprensivas y con imaginación, puede ser dura. Pero no es el tipo de película que se recree en esos aspectos ni mucho menos.
Pero, y vuelvo a repetirme, lo más interesante son las preguntas: ¿merece la pena utilizar o confiar en personas a las que en otra circunstancia se censuraría su comportamiento? ¿Es una solución dejar que alguien haga el trabajo sucio por nosotros cuando las cosas se ponen feas? Y el centro de todo: ¿el terror se combate con más terror? O la cuestión que tan bien planteada está en la novela El Señor de las moscas: bajo las circunstancias adecuadas, ¿todos podemos llegar a actos de mezquindad extrema?Ya es cosa de cada uno la lectura que se haga de todo esto, aunque evidentemente, la peli tiene su propia moraleja.
Pues no la conocia de nada…. y mira que Michael Sheen me gusta, y trinity pues no es que se la vea mucho, pero es que estoy saturado de Samuel L Jackson… que cansino.
Creo que la dejare pasar por el momento, ya tuve bastante del tema con 24h y aun me queda la ultima temporada por ver.
Es verdad! Yo ya no llevo la cuenta de pelis que he visto en los últimos tiempos en las que salga este señor.
Michael Sheen se sale en la peli, y Trinity no tanto, pero bueno, a mí me gustó bastante el trabajo actoral, y la peli en general.
Para mi, es de los mejores ejemplos modernos de una peli comercial con «contenido». Secundo tu recomendación.
Y, si me permiten el offtopic, un enlace Westerosi, más por la curiosidad de ver a los actores sin caracterizar o al bueno de Martin que por el contenido en sí:
http://www.machacas.org/game-of-thrones-en-la-comic-con
Por si le resulta interesante.
Hola! ^^
Pues me alegro de coincidir contigo en la opinión sobre la peli, en el momento en que la vi me pareció que tenía un mensaje claro moral. Me gustó.
Sobre lo otro, es que justo me has pillado esta tarde preparando mi propia entrada de la Comic-Con, con un texto-resumen que había encontrado por ahí. Hubiera molado estar ahí!!!
Tras lo que ha pasado este fin de semana, el: «da que pensar, ¿no?», parece más inevitable si cabe.
ROXE, desgraciadamente es un tema que siempre está de actualidad. 🙁
La vi hace como un año y me gustó mucho por el tema este de la violencia «legal» que ejerce el estado a través de operaciones secretas, la doble moral en los procedimientos y si, por dura y cruda.
Yo la recomiendo de todo a todo.